La gran mayoría de nosotros consideramos basura los tapacubos que vemos a un lado de la carretera. De hecho, los depósitos de coches suelen estar repletos de tapacubos.
Sin embargo, hay un hombre que utiliza estos tapacubos y algunas otras piezas para construir unas maravillosas obras de arte. Normalmente crea animales en un intrincado proceso de elaboración con el material de los tapacubos.
Lleva perfeccionando este arte desde el año 2003.
Sin embargo, se empezó a interesar por los tapacubos en 1997 y ya realizaba pequeñas obras con ellos. Tantos años con este hobby han dado sus frutos y ahora es capaz de crear obras tan impresionantes como esta:
Desde su web, el autor dice que todas las cosas tienen un valor intrínseco, a pesar de que hayan sido abandonadas.
Los tapacubos cumplen una mera labor estética que queda eliminada cuando se encuentran abandonados a un lado de la carretera. Este artista ha sabido darles un buen uso.
Sus obras tratan de concienciar a esta sociedad derrochadora en la que vivimos. Todo tiene un valor escondido, incluso aquello que se ha abandonado en un arcén.
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