jueves, 23 de octubre de 2014

¿Sabías que el estadio del Liverpool fue reformado para evitar que el público tirara sus excrementos al césped?


(Artículo recuperado del 6 de septiembre de 2012). El estadio del Liverpool ha pasado a la historia por el excepcional clima futbolístico que en él se vive cuando se canta el ‘You’ll never walk alone’ y por la animación que se vive en uno de sus fondos, ‘The Kop’ (en la imagen). Pero, ¿sabías que uno de los motivos de la remodelación de esta grada fue evitar que el público lanzara sus excrementos al campo de juego?



Entre los 60 y los 80, esta grada, en la que no se permitía la entrada de mujeres, vivió su máximo apogeo (ver vídeo). Aunque tenía capacidad máxima estimada para 20.000 personas de pie, se calcula que llegaron a emplazarse hasta 37.000 seguidores hacinados. ¿Cuál era el problema? Que en algunos lugares era materialmente imposible desplazarse para salir al baño y los hinchas orinaban en el mismo lugar que ocupaban o si tenían que hacer necesidades ‘mayores’, defecaban en un trozo de periódico que posteriormente lanzaban al césped.


 Esta anécdota es rememorada por todos los guías en las visitas a Anfield. El escritor y periodista, Tony Barret la vivió en primera persona. “No podías ir al baño, no podías moverte: enrollabas un periódico y listo ¿Por qué crees que no entraban chicas?”.


En un artículo de Taringa -en el que se recogían las palabras de Barret- se afirma también que las avalanchas eran numerosas y los desmayos habituales. “Yo nunca llevaba una libra, ni reloj ni las llaves. Antes de entrar me gastaba el último penique en la última pinta. Si te desmayabas, cosa bastante probable dada la aglomeración, te sacaban por encima de la cabeza de la gente. Cuando llegabas abajo, no tenías nada en los bolsillos. Era la ley: el que se desmayaba pagaba una ronda”, cuenta el pintor Peter Sheldon.


Finalmente, las condiciones de seguridad y de salubridad obligaron a aumentar el número de pasillos en detrimento de la capacidad, que en 1994 se redujo definitivamente a 12.390 personas, lo que provoca que pueda calcularse que por cada asiento que vemos ahora en el fondo de Anfield estuvieran tres personas de pie viendo un partido de los ‘reds’. Todo un espectáculo. Así cantaba The Kop, repleto, las canciones de los Beatles (desde el 0:55 del vídeo).




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